Supongo que, entre otras muchas cosas, la primavera rusa, no es la primavera tal y como la había conocido hasta ahora. Algo similiar ocurre en esta urbe con los puentes. Me refiero a lo que el DRAE define como "día o serie de días que entre dos festivos o sumándose a un festivo se aprovechan para vacación". Pues bien: en este país si hay un día de puente entre semana, este día se recupera trabajando el sábado. Así que, de este modo, técnicamente de puente nada.
El día 23 de febrero se celebró "el día del defensor de la patria" (день защитника отечества). Ante las constantes felicitaciones de diferentes amigos-conocidos-colegas rusos, el primer sorprendido era yo, y además por partida doble: primero, no soy de la patria y, segundo, yo de defensor poco... Después me explicaron que no era importante, que se felicitaba a todos los hombres por costumbre. Pero esto no fue lo más divertido.
Lo mejor fue el regalo que me hizo mi profesora particular de ruso, que es un encanto de mujer y profesa una paciencia desmesurada conmigo. Aparece el día de nuestra clase toda contenta y sonriente y me da un paquetito, "regalo del día del defensor..." todo eso. Abro el regalito y me encuentro un bote de champú. En este momento creo que es necesario hacer una pausa para reflexionar sobre el hecho. Creo que cualquier persona hubiera puesto la misma cara de circunstancia que se me quedó a mí después de abrir el regalo. Porque vamos a ver: ¿qué puedes pensar después de que te regalen un champú? yo creo que está claro: "Ok, tengo que empezar a lavarme más el pelo". Claro, yo no podía salir de mi asombro. Además intentas por todos los medios, en tu cabeza, pensar y convencerte " a ver, no puede ser, es imposible que te esté tirando una indirecta tan directa...además. ¡yo me lavo el pelo!"
Por suerte ella también se dió cuenta de mi gesto y enseguida se lanzó a explicarme que era la tradición en ese día. Se regala, o bien espuma de afeitar, o bien un champú. Al margen de lo extraña que pueda parecer la fiesta (creo que en España tenemos fiestas más ridículas y, sobre todo, más vergonzosas, como los toros), lo importante es que pude relajarme y normalizar la situación, al menos aparentemente. A los siguientes cuatro champús que me regalaron, ya no opuse ningún tipo de resistencia, es más, los agradecía enormemente. Así que: AVISO a todas las personas que tengan intención de venir a visitarme: NO TRAIGÁIS champú; aquí hay para todos los gustos y colores.
Al pasar los días estuve pensado en lo injusto que resulta todo esto al fin y al cabo. Me explico: dentro de nada es el día de la mujer y la costumbre es regalar bombones o flores. A ver: día del hombre- regalo: champú / día de la mujer- regalo: bombones... No me parece correcto. Y más en este país donde hacen unos bombones adictivos con un sabor imposible de describir.
De entre toda la variedad de bombones rusos, hay uno que resulta escpecialmente apetecible. Es un bombón de chocolate con un orejón en el interior y una avellana. Entre una compañera de la cátedra y yo mantenemos una guerra dialéctica sobre si es o no es un orejón. Yo defiendo la hipótesis de que sí, efectivamente se trata de un orejón; ella, en cambio, está convencida de que se trata de otra cosa. Para que cada uno saque sus propias conclusiones y pueda aportar su granito de arena a esta aparentemente frívola pero muy sesuda discusión, voy a colocar dos imágenes de, por un lado, un orejón:
Y por otro lado, un курага:
Pues eso mismo señores, observen y decidan...Yo creo que está claro, al menos, un orejón es un orejón, tanto en España como en Rusia.
Hasta pronto.
Bueno... podría tratarse de un orejón, pero es raro. Yo diría que es una protuberancia, que además la palabra mola mucho más que orejón. Nene, la primavera empieza hoy, y siento ser tan repelente en mi mensaje y contradecirte en todo lo que comentas. La beca no me la dieron, había como un millón de personas apuntadas. No, no había tantas, pero sí muchas y variadas. Bueno, voy a seguir con un trabajuelo que tengo del master, a ver si adelanto un poquillo. Un besito, rubiales. Muuuuuuuuas!
ResponderEliminarBelén
Nene, actualiza, noooo? Qué pasa, que hasta que no te digamos que es un orejón no das la entrada por finalizada??? Pues sí, vale, tienes razón es un orejón, orejóooooon!!! Actualizaaaaaaa!
ResponderEliminarBelén